jueves, 28 de abril de 2011

17 pioneros de Bolivia son entrenados altamente en la escuela de Korea Seul

mundo DOMINGO 24 DE ABRIL DE 2011
www.laprensa.com.bo
“Cambio yo primero, cambia
mi familia, cambia mi trabajo, cambia mi
país”, sencillo pero profundo.
Así, entre bromas, se exigía a cada uno el
cambio. David, un hombre cruceño querendón
de su tierra y del cigarro, dejó de fumar.
Fue el primer cambio. Como él, todos
sentían la necesidad de realizar un cambio
y poco a poco se iban poniendo metas.
Omar D. Ramirez, siempre firme y con la energía que
caracteriza a un joven dirigente  de la CSUTCB, estaba siempre
en primera fila. Eufronio, ya con más de 50
años encima, no sentía para nada el peso del
trajín de las actividades. Franklin, Genoveva,
Karina, Charlie, los más jóvenes del grupo, estaban
hambrientos de conocimiento, aunque
Charlie no perdonaba el arroz.
Los espacios de descanso son pocos y hay
que aprovecharlos. Habimael Castrillo, un
hombre del sur de Bolivia, se encarga de
darle el ritmo a la guitarra y hacer los espacios
agradables. Carla es la intérprete de facto.
Claro, nadie habla coreano y hay que comunicarse
en inglés, y ella lo sabe.
Las clases son intensas, hay que estar
atento, pero el sueño quiere vencer. ¡Despierten!,
grita la intérprete Déborah Lee,
que se convirtió en la pionera número 18.
Ante el grupo, Ariel, Agustín Nyama y Rodolfo
saltan asustados, pues sus ojos se estaban
cerrando ante la tentación de dormir.
La jornada de la tarde se inicia a las 14.00,
sólo unos 15 minutos después de haber concluido
el suculento almuerzo. “Señores —
anuncia el maestro Lee Hoyong—, hoy
aprenderemos a producir. Unos días de agricultores”.
Unos, en su vida habían agarrado
una pala, mientras que para otros era ya una
rutina. ¿Qué de nuevo? La tecnología; un
país que desarrolló en sólo 50 años tenía
mucho que enseñar. Ahí estaba el maestro
Lee Hoyong listo para transmitir su conocimiento
en la agricultura y en la elaboración
de abono orgánico.
Hasta ese día ya todos habían olvidado “la
vida de mundo”. Arroz a 65 grados de temperatura
servirá para preparara el MO1
(abono). Afanados preparan las bolitas que
después serán enterradas a 70 centímetros
de profundidad. Trabajo intenso el labrar la
tierra. Los 17 estaban aprendiendo a transformar
la calidad de la tierra árida en fértil,
como lo hicieron los coreanos en el pasado.
Con gran habilidad, Teresita, una tarijeña
de pollera, prepara las semillas de lechuga
que después serían sembradas. Ella y Rithlena
esparcen el abono en la tierra.
Pero no sólo es producir, sino que se debe
aprender a sobrevivir y a proteger el medio
ambiente, así que manos a la obra en la
construcción de hornos solares y baños
ecológicos. Y así lo hicimos.
El tiempo va pasando y poco a poco se
acerca la hora de marchar. La tristeza se
apodera de los alumnos y de los maestros.
Tres semanas de intensa actividad en las
que se aprendió sobre economía, lucha contra
la corrupción, solución de conflictos,
computación, patriotismo, agricultura, la
gimnasia de levantarse a las 05.00 y acostarse
a las 22.00, de limpiar el cuarto, el edificio,
reír... Fueron días de hermandad.
Todos están listos, aunque como es difícil
sacarle las malas costumbres al boliviano,
siempre tiene que haber algo que no haga
perfecta su vida. Dos días antes, la reprimenda
por la comisión de una falta sirvió
para reflexionar sobre el futuro. Ahora sí están
listos; los 17 pioneros tienen la misión
de cambiar primero y ser un ejemplo para
cambiar el país.
¡Gam sa ham nida Canaán! (¡Gracias Canaán!).
LOS PROFESORES, encabezada por Bum Il Kim, Randall Hoag, Kim Jangsaing y otros quienes son expertos y profesionales destacados de Corea brindaron toda la instruccion a los 17 pioneros de Bolivia: Franklin Gutiérrez, Omar Ramírez, Carla Zamorano, Genoveva Castro, Habimael Castrillo, Eufronio Herrera, David López, Sabia Velásquez, Charlie Choquehuanca, Rithlena Choque, Ariel Gutiérrez, Teresa Alarcón, Agustín Huanca, Nayma Huanca, Karina Ocampo, Rodolfo Quispe, Martín Balcázar.
Los becarios, aprenden a fabricar hornos solares.
A la hora del almuerzo, el grupo de bolivianos que viajó a Corea.
Los alumnos preparan semillas de lechuga para después sembrar.

No hay comentarios:

Publicar un comentario